“Necesito descansar ahora, pero será breve”, dijo Jeremías Ramos a su esposa antes de fallecer.
La realidad de que todos los niños alrededor del mundo puedan tener acceso a la educación está a un paso más cerca después de que la petición para que Cada niño, en todo lugar, en la escuela, liderada por la Iglesia Adventista y su brazo humanitario a nivel mundial, la Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA), sobrepasara el millón de firmas en julio de 2020.
“Realmente es una bendición ver a nuestra familia de la iglesia mundial y a ADRA juntas para apoyar a millones de niños que no tienen acceso a la educación en todo el mundo”, dijo el presidente de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, el pastor Ted Wilson.
“Nuestros hermanos y hermanas han mostrado que podemos ser una voz poderosa para el cambio cuando trabajamos juntos. Gracias a todos los que nos han ayudado a llegar al millón de firmas por su fuerte compromiso para hacer una diferencia significativa en las vidas de tantos niños alrededor del mundo”.
“Nuestra tarea no culmina aquí”, añadió Wilson. “Ahora debemos convertirnos en agentes de cambio en nuestras comunidades y usar nuestras voces para asegurar que cada niño, en todo lugar, tenga acceso a la educación y pueda alcanzar el potencial que Dios le ha dado para su vida al prepararse a sí mismo y a otros, por medio del poder del Espíritu Santo, para la pronta venida de Jesús”.
La vicedirectora de la junta de ADRA y vicepresidenta general de la Iglesia Adventista, Ella Simmons, dijo que los adventistas de todo el mundo “han expresado con fuerza y claridad que nos preocupa profundamente asegurar el acceso a la educación de millones de niños vulnerables, para que puedan aprender y prosperar”. “El compromiso conjunto de nuestra familia de la iglesia y ADRA para generar conciencia sobre este asunto de relevancia mundial dice mucho. Gracias por defender los derechos de todos los niños en todas partes. Aumentemos nuestros esfuerzos y magnifiquemos nuestras voces en nombre de los niños que no tienen voz”, agregó.
El cumplimiento de la tarea
La base de los comienzos para la campaña de educación se estableció en octubre de 2019 con el énfasis de la Iglesia Adventista y de ADRA en dar apoyo a aproximadamente 300 millones de niños, adolescentes y jóvenes a nivel mundial —o uno de cada cinco— que no están en la escuela según el informe de la UNESCO. Este es un número alarmante de niños que alrededor del mundo necesitan acceso a una educación de buena calidad y a una vida libre de explotación y de pobreza intergeneracional. Como resultado, ADRA y miembros de la Iglesia Adventista en casi 200 países se comprometieron a apoyar este asunto y la dinámica se esparció para conseguir firmas en línea, incluidos países en África, Asia, Europa, Latinoamérica y el Pacífico Sur.
Al crecer el impacto del coronavirus, la importancia de interceder por los niños que están fuera de las escuelas ha aumentado significativamente. Hoy más familias han quedado en situación de vulnerabilidad por pérdida de trabajo, enfermedad y otros problemas, lo cual ha afectado su capacidad de pagar una educación y ha llevado a que haya más niños fuera del sistema escolar. De hecho, hay 75 millones de niños en edad escolar que viven en 35 países afectados por la crisis y no pueden obtener una educación por el aumento de la vulnerabilidad, el cierre de las escuelas y otros motivos que son resultado directo de la pandemia de la COVID-19, según un informe de la UNESCO en el 2020.
El mundo le hace frente a una brecha educacional que va en aumento, especialmente entre los niños en situación de vulnerabilidad, y aunque un millón de firmas es un logro fenomenal digno de celebrar, solo estamos en el comienzo, explicó Michael Kruger, presidente de ADRA.
“Estamos desarrollando nuevas alianzas mundiales con organizaciones clave para amplificar nuestras voces”, mencionó. “Necesitamos su apoyo y compromiso continuo para asegurarnos de seguir progresando con relación a esta problemática. Es por eso que proveeremos recursos para que individuos, grupos e iglesias puedan hablar sobre este tema del acceso a la educación. También compartiremos detalles esenciales para que tengan un panorama claro de lo que necesitamos defender. Unamos fuerzas y llevemos esta iniciativa mucho más lejos”.
¿Qué vendrá después?
Con el alcance de un millón de firmas y el amplio apoyo, el siguiente paso de la campaña mundial es que la Iglesia Adventista y ADRA se unan para localizar este esfuerzo en países individuales, según explicaron los líderes de ADRA. Las decisiones sobre cómo se brinda la educación y cómo se costea no las toman los líderes mundiales, sino los líderes nacionales y estatales.
Según los líderes de ADRA, para llevar este esfuerzo a una instancia local, la campaña se concentrará en lo siguiente:
Definir una petición clara al gobierno. Cada país establecerá metas diseñadas específicamente para las necesidades educativas del país y las adaptará a las problemáticas educativas relevantes. Algunas prioridades principales serán: (1) defender el aumento de la asignación de una financiación escolar en países en vías de desarrollo; (2) aumentar la asistencia de ayuda extranjera para la educación; y (3) mejorar la inclusión social de los niños marginados.
Comunicar la petición a los líderes nacionales. Una vez que la petición se haya identificado, cada país tendrá que trazar una estrategia de aproximación a los legisladores y responsables políticos para asegurar que todos los niños tengan la oportunidad de obtener una educación. La presentación de la campaña a los líderes de mayor relevancia y a los legisladores en cada país será clave para este esfuerzo. Estos comunicados incluirán información sobre la campaña, la importancia de la educación, qué pueden hacer para asegurar que cada niño esté en la escuela, el éxito de la petición mundial y el tremendo apoyo básico que se encuentra por detrás.
Para apoyar la siguiente fase, los líderes compartieron que ADRA está desarrollando un informe de política que analizará el estado de los niños fuera de la escuela en todo el mundo y las políticas y acciones necesarias para abordarlo. Además, ADRA está desarrollando un kit de recursos para los departamentos ministeriales de la iglesia, las iglesias locales, los grupos de jóvenes y las escuelas, para que continúen con su participación más allá de la petición. Estos recursos estarán disponibles para ser distribuidos en octubre de 2020, según lo dijeron los líderes de ADRA.
Puedes descargar la guía «El próximo paso: desde el apoyo a la acción» y otros recursos importantes.
Además, ADRA informó que ha comenzado una clase magistral de promoción para construir, implementar y evaluar una estrategia de defensa adaptada a cada país, de forma individual. El curso está diseñado para ayudar a los países a entender cómo involucrar eficazmente a sus líderes para lograr el cambio. También estará a disposición un paquete de recursos que incluye plantillas de borradores de cartas, un informe de políticas, guías para reuniones, y más.
Puedes ver un video del anuncio oficial.
Acerca de Cada niño, en todo lugar, en la escuela
Cada niño, en todo lugar, en la escuela es un movimiento mundial dirigido por los adventistas para asegurar que cada niño en todos los lugares del mundo asista a la escuela, tenga acceso gratuito, equitativo y de buena calidad a una educación primaria y secundaria, y complete su educación para que pueda alcanzar el potencial que Dios le ha dado.
La versión original de este comunicado fue publicado por la Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales.